Cuántas veces hemos escuchado la frase: “la verdad de la milanesa” en un intento por reforzar un argumento o alguna idea, como si la propia milanesa le otorgara una condición de veracidad absoluta al argumento o idea en si?
Cuanto se ha dicho en nombre de “la milanesa”, y cuanto se ha difamado, a su vez, a este noble plato?
Pero seguramente ustedes como yo, mas de una vez se habrán preguntado: pero en si, cual es la verdad de la milanesa? y lejos de interrogar a la propia milanesa, situación que de ser llevada a cabo en público nos remitiría automáticamente a pasar un par de semanas de vacaciones en el Borda o en el Moyano (según corresponda), creo que cada uno de nosotros recurriendo a nuestros recuerdos culinarios, deberá encontrar la respuesta, sin prisa y sin pausa, como aquel que busca la luz, en un dormitorio ajeno, con cierta premura por ir al baño...
En lo que a mi respecta, la verdad, o mejor dicho las 10 verdades de la milanesa serían las siguientes:
1.- Nació en Milán, aunque los austríacos quisieron apropiarse del plato, y eso casi los lleva a una guerra.
2.- Originalmente se hacía con bifes de costilla y no con bola de lomo.
3.- Llegó a nuestro país, a principios del siglo XX traída por los inmigrantes italianos.
4.- La milanesa a la napolitana, no es un intento por reconciliar el norte y el sur de Italia (algo absolutamente imposible), sino que se remite al invento de un cocinero tucumano que trabajaba en un restaurante que quedaba frente al Luna Park llamado precisamente “Nápoli”.
5.- Que se la pasa por huevo y después por pan rallado o rebosador y nunca al revés.
6.- Que si en vez de pan rallado o rebosador, la pasás por harina, deja de ser milanesa para convertirse en escalope.-
7.- Que con ajo y perejil queda mucho mas rica.-
8.- Que junto a una porción de papas fritas y huevos fritos, era el plato preferido para todos los chicos nacidos en las décadas del 60’s, 70’s, 80’s y 90’s. Las nuevas generaciones prefieren el Super Big Fuckin’ Mack Combo (Hyper Remix Boobaloo) in the Happy Box de McDonals o alguno de esos engendros similares.
9.- Que a mi la milanesa o “biralesa”, me gusta como Dios la trajo al mundo, o sea: sin limón, ni mostaza, ni mayonesa, ni ketchup, ni nada...
10.- Que nuestros irmãos brasileiros (sobre todo en los estados del sur) hacen unas milanesa gigantes (cuando no, o mais grandes do mundo!) pero con carne de cebú, que si bien no dejan de ser sabrosas, a la hora de masticar son casi tan duras como el cable del mouse que tenés debajo de tu mano derecha...
Y para vos chabón, cuál es la verdad de la “milanga”?
Cuanto se ha dicho en nombre de “la milanesa”, y cuanto se ha difamado, a su vez, a este noble plato?
Pero seguramente ustedes como yo, mas de una vez se habrán preguntado: pero en si, cual es la verdad de la milanesa? y lejos de interrogar a la propia milanesa, situación que de ser llevada a cabo en público nos remitiría automáticamente a pasar un par de semanas de vacaciones en el Borda o en el Moyano (según corresponda), creo que cada uno de nosotros recurriendo a nuestros recuerdos culinarios, deberá encontrar la respuesta, sin prisa y sin pausa, como aquel que busca la luz, en un dormitorio ajeno, con cierta premura por ir al baño...
En lo que a mi respecta, la verdad, o mejor dicho las 10 verdades de la milanesa serían las siguientes:
1.- Nació en Milán, aunque los austríacos quisieron apropiarse del plato, y eso casi los lleva a una guerra.
2.- Originalmente se hacía con bifes de costilla y no con bola de lomo.
3.- Llegó a nuestro país, a principios del siglo XX traída por los inmigrantes italianos.
4.- La milanesa a la napolitana, no es un intento por reconciliar el norte y el sur de Italia (algo absolutamente imposible), sino que se remite al invento de un cocinero tucumano que trabajaba en un restaurante que quedaba frente al Luna Park llamado precisamente “Nápoli”.
5.- Que se la pasa por huevo y después por pan rallado o rebosador y nunca al revés.
6.- Que si en vez de pan rallado o rebosador, la pasás por harina, deja de ser milanesa para convertirse en escalope.-
7.- Que con ajo y perejil queda mucho mas rica.-
8.- Que junto a una porción de papas fritas y huevos fritos, era el plato preferido para todos los chicos nacidos en las décadas del 60’s, 70’s, 80’s y 90’s. Las nuevas generaciones prefieren el Super Big Fuckin’ Mack Combo (Hyper Remix Boobaloo) in the Happy Box de McDonals o alguno de esos engendros similares.
9.- Que a mi la milanesa o “biralesa”, me gusta como Dios la trajo al mundo, o sea: sin limón, ni mostaza, ni mayonesa, ni ketchup, ni nada...
10.- Que nuestros irmãos brasileiros (sobre todo en los estados del sur) hacen unas milanesa gigantes (cuando no, o mais grandes do mundo!) pero con carne de cebú, que si bien no dejan de ser sabrosas, a la hora de masticar son casi tan duras como el cable del mouse que tenés debajo de tu mano derecha...
Y para vos chabón, cuál es la verdad de la “milanga”?